Tras la partida del Coco, se barajan muchos nombres y todos tienen algo en común: al igual que Alfio, son todos partuzeros

Julio Hijo de Puta Grondona, presidente y sorete vitalicio de (f)AFA, anunció los nombres que se analizan como sucesor de Basile. El primero que surgió, fue el del Checho Batista, flameante campeón olímpico. El checho es famoso por haber sido agarrado in fraganti en el baño del micro de la selección en un torneo de "saques" con el diego (esto es verdad! no es joda!), aunque nadie recuerda ver ni raquetas ni pelotas. Lo único que había parecido a una cancha de tenis o voley, eran las líneas. El 2do nombre que se dice en el ambiente, es el del propio Diego. Sin embargo, fuentes cercanas a Grondona, dicen que Maradona estaría involucrado en cuestiones cercanas a las drogas. Pero tal vez sean sólo rumores, quizás tan falsos como los que dicen que sus hijas están ambas embarazadas de Sergio Agüero, quien sería en realidad un hijo no reconocido del diez, certificando la frase "todo queda en familia".

Otros rumores de los pasillos son Pablo Escobar y Ben Johnson. El primero, apodado alguna vez "el zar de la cocaína", cumpliría todos los requisitos; colombiano y fanático del buen fútbol, experiencia internacional (de todo tipo) y además traería mucho dinero (su fortuna personal se valuó en 5 a 10 mil millones de dólares). El único inconveniente es el tiro en la oreja que le pegaron en el 93'. Johnson por su parte, tiene a favor ser amigo de Maradona y su experiencia con los dopings positivos. Pero sería negro, y esto no agradaría a algunos jugadores como al Cata Díaz y a Carlitos Tevez, ambos de ascendencia escandinava. Finalmente, el nombre más votado y por el que finalmente se volcaría don Julio, sería el de Alfio Basile. El coco ya dirigió a la selección dos veces y sólo fracasó en un Mundial. Además, héroe del whisky y socio N°3 del hipódromo, es amigo de mostaza Merlo y un putañero con experiencia. El único inconveniente es que los jugadores sólo oyen frecuencias superiores a los 100Hz, como la mayoría de los humanos, lo que impediría escuchar frases distintas a "Mascherano! Dásela a Messi!"